San Juan Bautista

Ajuria (Muxika)

Un cielo raso azul cobija el retablo de San Juan Bautista.

Cronología: s. XIX (1852)
Estilo: Neoclasicismo
Municipio: Muxika
Barrio: Ajuria
Coordenadas: 43.251822,-2.658049

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Advocación

La fiesta de San Juan Bautista, al contrario que la de otros santos, no conmemora su muerte sino su nacimiento: según el Evangelio fue santificado en el vientre de su madre, Santa Isabel, en la Visitación de su prima, la Virgen María. San Juan Bautista es llamado “precursor de Cristo”, por ser para la tradición cristiana el último profeta que anuncia la llegada del Mesías.

Realizó su misión a comienzos de la era cristiana, en el río Jordán, donde bautizaba a los que buscaban la conversión. Entre las persona a las que bautizó estuvo Jesús de Nazaret. De ahí su sobrenombre de Bautista.

El Evangelio lo describe como un ermitaño que vivía en el desierto y se cubría con pieles de camello. Por tanto, suele aparecer representado como un hombre de pelo y barba desaliñados, vestido con una piel de camello y con el dedo en alto, en actitud de señalar, ya que es quien muestra y señala a Jesús de Nazaret como el Mesías y el Hijo de Dios.

Tradiciones y Ritos

El 24 de junio, festividad del nacimiento de San Juan Bautista, se celebra misa mayor y romería en la plaza del barrio.

Antiguamente se llevaba a cabo una romería para celebrar la fiesta de San Isidro el 15 de mayo, pero en la actualidad sólo se celebra una misa en honor de este santo, cuya imagen se custodia en el interior de la ermita.

Edificio

La ermita de San Juan Bautista actúa como parroquia aneja a la de la Asunción de Santa María, en Ibarruri. Tiene un tamaño mayor que otras ermitas de su entorno, debido a la presencia de la sacristía, al pórtico y a la torre, aglomerado todo de forma un poco irregular a los pies del templo. Fue reconstruida en 1852 por el arquitecto Hilarión de Iturrioz, en el lugar donde había existido una pequeña ermita gótica del siglo XV.

De esta primitiva construcción se conserva únicamente el acceso, de arco apuntado, compuesto con grandes dovelas, que ha quedado descentrado respecto de la iglesia actual. En el lado sur, bajo el pórtico, tiene otra entrada, más moderna, adintelada y definida por grandes sillares. Al interior, bajo la cubierta a dos aguas sobre arcos fajones, tiene un coro elevado a los pies, con barandilla de madera de sección romboidal. En el lado opuesto, sobre el retablo, un cielo raso de madera, pintado en azul y con estrellas doradas, destaca la zona del presbiterio.

El acceso de arco apuntado es lo único que se conserva de la primitiva ermita gótica.

En el lado sur, bajo el pórtico, hay una entrada adintelada.

A los pies del templo, un coro con barandilla de madera.

Un cielo raso de madera, pintado en azul y con estrellas doradas, destaca la zona del presbiterio.

Ajuar

Lo más destacable es el retablo neoclásico con la imagen de San Juan Bautista que preside el altar, rematado por una cartela con la inscripción “JOANNES BAPTISTA PRAECURSOR DOMINI” (“Juan Bautista, precursor del Señor”), flanqueada por dos ángeles desnudos. Rodean este retablo imágenes del Corazón de María, San José con el Niño Jesús, San Antonio, Nuestra Señora del Rosario, el Sagrado Corazón de Jesús y San Isidro. Son casi todas piezas de principios del XX –salvo el San Antonio, barroco del XVII–.

En el lado del evangelio, a la derecha según se mira al altar, hay un púlpito de madera decorado con paneles dorados.

En la sacristía hay un aguamanil del siglo XIX tallado en piedra, que antiguamente se utilizaba para la limpieza ritual de manos del sacerdote antes de la misa. Aquí se conservan, además, varias imágenes: una Virgen María con el Niño en el regazo (Andra Mari), de mediados del siglo XIV; San Juan Bautista, romanista de fines del XVI, preparado para sacar en procesión; y un Santiago peregrino, un Crucificado y un santo obispo, que podría ser San Ildefonso, los tres del XVII.